El Tarot para el Autoconocimiento
Cuando se habla del Tarot, solemos pensar en este como una herramienta “mágica” para adivinar qué nos trae el futuro. De hecho, el Tarot se ha hecho popular gracias a clarividentes que se dedican a leer las cartas para orientar a las personas. Si bien es cierto que con el Tarot podemos dar un vistazo a lo que nos espera, no es su único fin. Pocos saben que es posible aprovechar el Tarot para el autoconocimiento.
Si sabemos cómo utilizar las cartas, podemos aprender muchas cosas sobre nosotros mismos que quizá hemos ignorado de forma consciente o inconsciente. En cualquier caso, las cartas pueden ayudarnos a confrontarnos con todo eso de lo que solemos huir.
De esta manera, no solo podrás conocer tu futuro, sino también tu presente y el pasado. En el mundo de las cartas, las barreras del tiempo son diferentes y nos permiten trascender a planos más elevados. Si quieres iniciar este viaje, solo sigue nuestros consejos.
Conociendo más sobre el Tarot
Antes de lanzarnos en un viaje de autodescubrimiento con las cartas del Tarot, primero necesitamos estudiarlas bien. Estas cartas no son un invento reciente, su origen se ubica cientos de años atrás, en la Edad Medieval. Un mazo clásico se compone de 78 cartas, cada una con un nombre, números e imágenes diferentes.
Hay personas que tienen un mazo de cartas y lo usan nada más que para jugar, ya que desconocen su poder. Sin embargo, cuando sabemos cómo usarlas, podemos beneficiarnos del poder que tiene el Tarot para el autoconocimiento. Lo primero que debes saber es que existen dos tipos de cartas, los arcanos mayores y los arcanos menores.
Cada una de las barajas encierra una historia particular que representa algún aspecto de la vida humana y el universo. Entre los arcanos mayores y menores encontramos distintos símbolos que deben ser estudiados por separado.
Arcanos Mayores
En el caso de que te propongas estudiar las cartas del Tarot, lo primero que debes conocer los Arcanos mayores. Estas son 22 cartas y muchos clarividentes, tarotistas y adivinos se bastan con ellas para hacer sus lecturas. Aunque, eso no quiere decir que el resto de las cartas sean inútiles, más bien significa que son bastante universales.
Por otro lado, las 11 barajas restantes simbolizan factores externos que pueden tener influencia sobre la vida. Podemos tomar como ejemplo la carta XI, La Luna, que tiene que ver con confusión y la necesidad de salir adelante.
Arcanos Menores
Las 56 cartas restantes son los Arcanos menores. Se dice que estos reflejan diferentes situaciones de la vida cotidiana que enfrentamos las personas de forma constante. Algunos tarotistas no utilizan estas cartas para sus lecturas, dado que no las consideran necesarias. Pero, como te dijimos antes, eso no quiere decir que no sirvan para nada.
Lo que sucede en realidad, es que las personas suelen acudir con adivinadores por cuestiones bastante importantes. Por lo tanto, los Arcanos menores que se relacionan con situaciones más sencillas, no suelen ser necesarios. No obstante, cuando se usa el Tarot como método de autodescubrimiento, pueden ayudarnos a descubrir aspectos importantes de nuestra vida.
Cuando los Arcanos mayores no son muy claros respecto a alguna situación, los Arcanos menores pueden ofrecer más claridad. Dependiendo de a qué serie o figura pertenezcan, se asocian con diferentes factores:
- Espadas. Se relacionan con el espíritu.
- Bastos. Tienen que ver con la experiencia.
- Oros. Su significado es la materia o bienes materiales.
- Copas. Asociadas a las emociones.
La posición de las cartas en el Tarot
Si te interesa usar el Tarot para el autoconocimiento, otra cosa que debes conocer es la importancia de la posición de las cartas. Dependiendo de si salen del derecho o al revés, la interpretación del significado es distinta. Para ilustrar esto mejor, tomemos como ejemplo la carta de la Reina de Copas.
Cuando sale al derecho, la Reina de Copas se relaciona con la compasión, seguridad, calma, amor y comprensión. Si sale del revés, entonces sería lo contrario: celos, mentira, conflicto, volatibilidad e incomprensión. Entonces, siempre debes vigilar la posición de tus cartas en cada tirada, puesto que eso influye en su interpretación.
La interpretación global
Siguiendo este hilo, otra cosa que debes considerar siempre sobre las cartas, es que una sola no basta para dar una interpretación. Es decir, si te sale una carta que representa tristeza o decepción, no significa que eres alguien deprimido o decepcionado. Durante las lecturas hay que poner atención a las otras cartas alrededor porque se conectan entre sí.
Entonces, si te sale una carta relacionada con la tristeza junto a otra relacionada con la superación, el mensaje cambia. Puede ser que la baraja te hable de que debes tomar la decisión de salir de tu estado de tristeza para poder crecer.
¿Puedo usar el Tarot para conocerme mejor?
Como te mencionamos al principio, cuando se habla del Tarot, se suele relacionar con la adivinación del futuro. Pero, hay personas que encuentran las cartas como una herramienta esencial para su desarrollo personal. A pesar de que puede parecer extraño, mediante el Tarot podemos llegar a reflexiones importantes sobre nuestra vida. A esta práctica se le ha dado el nombre de Tarot terapéutico, debido a que no tiene que ver con saber el futuro.
De este modo, el Tarot como herramienta terapéutica puede ser útil para lidiar con conflictos personales, familiares o de pareja. Incluso sirve en situaciones relaciones con el trabajo, estudios y cualquier otro interés que tenga la persona. Recordemos que las cartas simbolizan todos los aspectos de la vida humana.
¿Cómo usar las cartas del Tarot?
La primera etapa del autodescubrimiento con las cartas, consiste en aprender cómo usarlas. Cabe mencionar que este no es un proceso sencillo que se termina de la noche a la mañana. Los clarividentes o adivinos expertos pasan por muchos años de práctica para alcanzar el nivel que tienen. No olvides que los caminos del ocultismo no siempre son claros y hay que aprender de ellos.
Paso 1: Aprende más sobre las cartas
Para empezar, necesitas familiarizarte con todas las cartas. Si se te hace muy pesado, puedes iniciar con los Arcanos mayores primero. Tómate un tiempo de tu día para investigar el significado que tienen los símbolos de cada carta y anótalos o memorízalos. Algo que se aconseja es tener en cuenta los pensamientos o ideas que tienes al observar cada carta.
Así, podrás darle un significado más personal a cada una de las barajas. Esto resulta beneficioso cuando usas el Tarot para el autoconocimiento, dado que mezclas tu energía personal con sabiduría ancestral. Como resultado, tendrás una conexión más profunda con las cartas y tu conexión será más enriquecedora.
Paso 2: Abre tu tercer ojo y Afina tu Interpretación
Además de la visión, el gusto, olfato y tacto, los seres humanos contamos con otro tipo de sentidos u órganos energéticos. Uno de los más conocidos es el tercer ojo que, según afirman los sabios, se ubica en la zona entre las cejas. Todas las personas lo poseemos, sin embargo, este órgano permanece “dormido” o cerrado hasta que algún evento lo activa.
En este mismo sentido, el tercer ojo es un órgano que facilita la intuición y la conexión con el plano cósmico. Por tal motivo, los adivinadores, profetas, clarividentes y tarotistas se esfuerzan por despertarlo y fortalecer su poder. A continuación, te mostraremos dos métodos para despertar tu tercer ojo:
Con Cristales
Existen gemas como la fluorita, el cuarzo rosa, azurita y labradorita que pueden ayudarte a abrir el tercer ojo. Puedes intentar este método con un péndulo hecho con alguna de estas piedras o con el cristal solo. Lo que debes hacer es colocar el cristal o péndulo en la zona entre tus cejas, concentrando toda tu atención en esa región.
Ahora, cierra tus ojos y respira para tranquilizarte, mientras más calmado estés, mejor será. Intenta visualizar en tu mente como la energía del cristal fluye hacia tu tercer ojo y lo carga. Practica este ejercicio por el tiempo que te sientas cómodo, es importante que no te sobre esfuerces. De lo contrario, podrías hacer más lento la apertura de tu tercer ojo.
Quizá te preguntes: ¿cómo puedo saber que mi tercer ojo se abrió? No hay una sola respuesta. Algunas personas dicen sentir un calor recorrer su cuerpo cuando ocurre. Otros expresan tener visiones sobre eventos de su vida actual o vidas pasadas. Las manifestaciones pueden ser diferentes, pero de seguro notarás cuando ocurra.
Con intuición
Para este segundo método no necesitas ningún material adicional, solo necesitas pensar en alguna situación de tu vida. Debe ser alguna experiencia para la que necesites alguna respuesta y no sepas qué hacer. Una vez que la identifiques, procede a hacer el siguiente ejercicio:
Busca un lugar tranquilo para sentarte y relajarte y piensa en una pregunta específica sobre la situación que vives. Luego, toma tres respiraciones profundas mientras enfocas tu atención en la zona del tercer ojo. En este momento, debes pedirle a tu tercer ojo que se abra.
Si logras despertarlo con éxito, es probable que tengas algún tipo de visión sobre la pregunta que hiciste. En caso de que no veas, repite el ejercicio hasta que consigas visualizar alguna imagen o palabra. Esa será la señal que te hará saber que tu tercer ojo está activo.
Paso 3: Elige un método para tirar las cartas
La siguiente parte de cómo usar el Tarot para el autoconocimiento, consiste en definir tu propio método de lectura. Hay muchas maneras posibles en que puedes organizar tus cartas para tus sesiones. Una de las más comunes, es organizar las cartas de izquierda a derecha en tres pilas o mazos equitativos.
Esta organización representa las tres líneas temporales (pasado, presente y futuro) y sirve para indagar más en el tiempo. Sin embargo, lo ideal es que definas un estilo propio para tirar tus cartas. Ten en mente que mientras más personal sea tu conexión con las cartas, mejores lecturas conseguirás. Aunque, si quieres algo de ayuda, puedes organizarla según los planos de tu vida: social, laboral, intelectual, espiritual, económico, etc.
Conversando con las cartas
Cuando hayas seguido los pasos anteriores, estarás mejor preparado para iniciar tu proceso de autodescubrimiento. Te recomendamos que busques un lugar tranquilo para sentarte con tu mazo y hacer las lecturas. Si lo deseas, puedes encender algún incienso que te ayude a relajarte y a mantener las energías equilibradas.
Después, toma la primera carta y tírala sobre la mesa. Obsérvala de forma detenida y trata de recordar su simbolismo. Ten en consideración que no hay cartas malas o buenas, todas son neutrales y muestran diferentes aspectos de nuestro ser. Veamos un ejemplo para entender mejor cómo puedes desarrollar un diálogo introspectivo con las cartas.
Si es la carta que te aparece, debes intentar relacionarla con tu vida, por ejemplo, podrías preguntarte: ¿hay algo en lo que no he podido decidir? ¿tengo miedo de tomar decisiones importantes? A medida que te cuestiones, es probable que pienses en diferentes situaciones. Poco a poco, las cartas te irán llevando por diferentes caminos dentro de tu ser y podrás aprender más de ti mismo.
Para finalizar, si deseas aprender más sobre cómo usar el Tarot para el autoconocimiento, te invitamos a buscar ayuda profesional. Existen muchos expertos en esta área que dan lecciones sobre el tema y podrían orientarte mejor. Puedes encontrar más información sobre este tema en Los Mejores Oráculos para Principiantes.
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