¿Cómo usar un péndulo correctamente?

En el mundo de la adivinación podemos hallar diferentes instrumentos para canalizar energías y pedir respuestas al universo. Uno de los más conocidos es el péndulo y es uno de los más sencillos de adquirir o elaborar. No obstante, eso no quiere decir que se pueda utilizar de cualquier manera. Es importante aprender cómo usar un péndulo correctamente.

Si quieres conseguir información más precisa para orientarte, es esencial seguir ciertas reglas. De lo contrario, el péndulo no funcionará bien y no tendrás respuestas acertadas a tus preguntas. Aquí te enseñaremos cómo sacarle provecho a este aparato y conocerás datos fundamentales sobre este arte oculto.

¿Qué es un péndulo y para qué sirve?

Un péndulo es un aparato que se encuentra suspendido en el aire y se mueve en diferentes direcciones dependiendo de ciertos factores. En este sentido, los péndulos se utilizan desde hace miles de años con diversos fines. Por ejemplo, las civilizaciones solían recurrir a los péndulos para descubrir fuentes de agua.

Por otro lado, los péndulos también se usan en aparatos como relojes para que estos funcionen de manera correcta y como elemento decorativo. Como puedes ver, son un instrumento bastante versátil y en el campo de la adivinación son bien valorados.

Los expertos en el arte de la adivinación afirman que es posible canalizar energías mediante péndulos. De este modo, se pueden hacer preguntas sobre el pasado, presente o futuro para descubrir cosas. Así, se podría usar un péndulo para cosas tan sencillas como saber dónde dejamos el móvil o temas más serios como buscar a alguien perdido.

Siguiendo esta línea, para entender cómo usar un péndulo correctamente, primero debemos saber más sobre estos utensilios. Para comenzar, veremos cuáles son los principios que rigen la función de dichos dispositivos con más detalle.

Los péndulos y la radiestesia

La ciencia ha demostrado que casi todos los cuerpos son capaces de emitir y recibir radiaciones eléctricas y magnéticas. Por ejemplo, las neuronas de los seres vivos producen un impulso químico y eléctrico que transmite información.

En esta misma línea, ciertos artefactos como las brújulas funcionan gracias a la existencia de los campos electromagnéticos de nuestro planeta. Es así como los exploradores pueden saber dónde se encuentra el norte en todo momento.

De forma similar, la capacidad de los péndulos para adivinar tiene que ver con energías eléctricas y magnéticas. Los péndulos cumplen la función de receptores y nos permiten saber cosas sobre las radiaciones que están captando.

Aunque, debemos tener en cuenta que los péndulos no actúan directamente sobre aquellas situaciones o personas de las que queramos saber. Al contrario, estos captan nuestra propia energía intuitiva para ayudarnos a conseguir orientación en distintas situaciones. Dentro de este proceso entra en juego otro fenómeno conocido como el efecto ideomotor.

Los péndulos y el efecto ideomotor

Como te mencionamos antes, los péndulos funcionan debido a la existencia de energías eléctricas y magnéticas de los cuerpos. Más no se trata de cualquier objeto o persona, sino de las radiaciones que nosotros mismos emitimos. En otras palabras, lo que hace el péndulo es permitirnos canalizar la energía psíquica propia para hacer suposiciones sobre los eventos.

Con el objetivo de comprender mejor esto, hablaremos sobre el efecto ideomotor. Este es un fenómeno psicológico bien estudiado por la ciencia que explica cómo las personas realizan movimientos inconscientes ante ciertos estímulos.

A menudo se cita este efecto como una evidencia para desacreditar ciertas prácticas como las tablas de Ouija. Según afirman los escépticos, los mensajes en las tablas serían producto de movimientos inconscientes hechos por las personas. Lo mismo aplicaría para otras cosas como los péndulos.

No obstante, quienes saben cómo usar un péndulo correctamente, también están conscientes de que esto no significa que los péndulos no sirvan. Al contrario, el efecto ideomotor es una prueba de que, en realidad, estos artefactos pueden canalizar la energía psíquica. Por ende, aumentan nuestra habilidad para intuir y nos permiten descubrir respuestas.

En resumen, los péndulos funcionan porque pueden conectarse con nuestro yo profundo o inconsciente y canalizar su energía. Al final, todo se reduce a nuestro propio poder para intuir acerca del mundo y las situaciones de la vida.

¿Cómo hacer un péndulo casero?

Si deseas iniciarte en el arte de la adivinación con péndulos, primero necesitas tener uno. Para eso tienes dos opciones, puedes comprar uno en una tienda especializada o hacer uno tú mismo. A pesar de que hay quienes tienen ciertas reservas con los péndulos caseros, estos funcionan igual de bien. Por supuesto, siempre y cuando los elabores de manera adecuada.

En caso de que quieras armar tu propio péndulo casero, vas a necesitar los siguientes materiales:

Una cuerda de entre 10 y 13 centímetros.
Un anillo, arandela o cristal de tu preferencia.

Los péndulos con cristales no solo se usan para adivinar, también sirven para aplicaciones terapéuticas. Aunque se deben comprar gemas específicas para la sanación. Una vez que tengas tu péndulo, es momento de aprender a usarlo.

¿Cómo usar un péndulo correctamente para adivinar?

Ahora que tienes tu instrumento, es importante que conozcas las reglas para adivinar con este. Por suerte, no es un proceso complicado, solo tienes que seguir algunos pasos esenciales. De este modo, podrás asegurarte de que las lecturas que hagas sean lo más precisas posibles.

Paso 1: Magnetiza el péndulo

Como te explicamos antes, los péndulos canalizan tu energía psíquica y aumentan la capacidad de intuición. Por lo tanto, es necesario impregnarlo con tus vibraciones para que puedas utilizarlo. El proceso para conseguirlo es este:

Siéntate en una habitación tranquila, libre de cualquier aparato eléctrico que pudiera causar interferencia.
Toma el péndulo y colócalo a unos 5 centímetros de tu mano.
Pon tu mano con la palma mirando hacia el cielo.
Evita la tensión, trata de que tu mano esté lo más relajada posible.
Balancéalo para que empiece a oscilar sobre tu mano hasta detenerse y listo, ya está cargado.

Paso 2: Aprende el lenguaje del péndulo

El segundo paso para cómo usar un péndulo correctamente es entender su lenguaje. No todos los péndulos se mueven de la misma manera, ya que la energía de cada persona es distinta. Para saber cómo se comunica tu péndulo realiza el siguiente proceso:

Siéntate en un lugar silencioso y tranquilo, recuerda evitar sitios con muchos dispositivos eléctricos ya que pueden influir.
No cruces las piernas ni brazos, debes estar abierto a la energía.
Sostén el péndulo colgando por encima de tus ojos, en la zona entre tus cejas. Allí es donde se ubica el tercer ojo, el órgano energético que permite adivinar.
Concéntrate y dile al péndulo “Enséñame un sí”. Espera, es posible que la respuesta aparezca en segundos o después de unos minutos.
Observa el movimiento y memorízalo. Por ejemplo, si se mueve de forma vertical, entonces eso significa “sí”.
Repite los mismos pasos, pero esta vez solicítale que te muestre un “no”.

Ten en cuenta que los péndulos solo pueden responder a preguntas de “sí” o “no”. Aunque eso no significa que no puedas averiguar sobre temas amplios, la clave está en saber cómo preguntar.

Paso 3: Verifica la precisión

Una vez que magnetizas y entiendes cómo se comunica tu péndulo, es importante verificar que sea preciso. Esto lo puedes comprobar realizando preguntas simples y bastante obvias, como “¿soy una persona?”. Si acaso te das cuenta de que responde de forma errática, entonces algo está ocurriendo. Tal vez haya aparatos en la habitación que interfieran o no está bien magnetizado.

De igual forma, tu estado emocional puede afectar de manera negativa la capacidad de tu péndulo. Si estás alterado, molesto o turbado de algún modo, lo mejor será intentar cuando te sientas más tranquilo. No olvides que el péndulo canaliza tu propia energía, por ende, no funcionará bien si no fluye de manera armónica.

Paso 4: Utiliza tu péndulo como prefieras

Si has seguido los pasos anteriores y todo ha ido bien, entonces ya puedes comenzar a utilizar tu péndulo para adivinar. Primero, colócalo a la altura de tu tercer ojo, concéntrate y formula la pregunta que quieras. Recuerda que deben ser preguntas simples, no servirá para darte respuestas amplias o demasiado ambiguas.

Luego de que hagas la pregunta, apoya tu codo sobre la mesa con cuidado de no mover el péndulo por accidente. Espera a que ocurra algún movimiento y obtendrás la respuesta a tu pregunta. Si ves que no pasa nada, repite la pregunta y ten paciencia.

¿Qué hago si tengo dudas sobre la respuesta?

Los instrumentos como péndulos no son 100% precisos, después de todo, se trata de manipular energías que pueden ser volátiles. De esta forma, es normal tener dudas respecto a alguna respuesta que te haya dado tu instrumento. Cuando esto sucede, lo primero que deberías hacer es preguntarle a tu péndulo si está diciendo la verdad.

En caso de que la respuesta sea afirmativa, procede a preguntarle si es posible repetir la pregunta que ya hiciste. Si dice que sí, haz la interrogación de nuevo para verificar la respuesta. De lo contrario, no intentes forzarlo, déjalo así.

Algunas personas que utilizan péndulos tienen la costumbre de apoyarse en tableros caseros o comprados para adivinar. Se pueden encontrar modelos sencillos con las palabras “sí”, “no”, “tal vez”, hasta otros más complejos con números y letras. Estos últimos se recomiendan para personas que ya tengan más experiencia con la adivinación.

¿Cómo usar un péndulo correctamente para sanación?

Los péndulos no solo son útiles para adivinar, sino también para brindar equilibrio energético a nosotros mismos u otros. Si quieres aprender cómo usar un péndulo correctamente para curar, lo más recomendable es que sea uno con una amatista.

A continuación, coloca el péndulo frente a ti, concéntrate y trata de conectarte con tu Yo superior. Para verificar que así sea, pregúntale al péndulo si estás conectado con tu Yo superior. Si la respuesta es sí, entonces puedes iniciar con el proceso de sanación energética.

Lo que debes hacer es ir pasando el péndulo por los puntos de tu cuerpo donde se hallan los centros de energía o chakras. Cuando posiciones el péndulo sobre uno de estos, fíjate en su movimiento. Si se mueve marcando un “sí”, quiere decir que hay un bloqueo energético en esa zona. En esa situación, puedes recitar algún mantra sanador para liberar la energía y transformarla.

Repite el mismo proceso en cada zona de tu cuerpo donde encuentres bloqueos. Al terminar tendrás una sensación de tranquilidad, lo cual significa que tus energías están equilibradas de nuevo. Si lo haces de manera periódica, es posible observar mejorías en tu estado de ánimo y salud general.

Consideraciones Importantes

La salud tanto mental como física es muy importante y no se debe tomar a la ligera cualquier problema en estos planos. En esta misma línea, es esencial recordar que instrumentos como los péndulos o cristales no deben considerarse un reemplazo para la medicina tradicional. Más bien deben verse como tratamientos alternativos que sirven de complemento.

Lo mismo aplica para las situaciones de la vida cotidiana donde necesitas algo de orientación. No es recomendable que dependas de los cristales para cada decisión que vayas a tomar porque podría traerte problemas. Sobre todo, cuando se trata de decisiones importantes que podrían cambiar el rumbo de tu vida.

Ten en mente que hay muchas variables que pueden afectar cómo se desarrollan los acontecimientos. No siempre se trata de la suerte, con frecuencia son nuestras propias decisiones quienes afectan el destino. Por tal motivo, recuerda confiar en tus instintos e inteligencia para tomar decisiones sobre tu vida.

Por último, no olvides magnetizar tu péndulo en cada sesión de adivinación y para los péndulos sanadores, limpia los cristales después de cada uso. También considera el hecho de que conocer cómo usar un péndulo correctamente es algo que toma tiempo. A medida que practiques te irás volviendo más diestro en este arte y podrás sanar o adivinar con más precisión.